jueves, 16 de agosto de 2012

Hecho arquitectónico

Elección de un hecho arquitectónico de mi barrio...... 

 El echo arquitectónico que primero se me vino a la mente fue el museo de arte de tigre que esta ubicado al final del paseo victorica, camino que costea el rió tigre.
  Su historia es la siguiente: 

En 1909 los Señores Ernesto Tornquist, Luis García y Emilio Mitre, todos ellos empresarios, deciden asociarse para fundar un club de tenis, golf, regatas y juegos, en el idéntico espacio, donde posteriormente, en 1927, sería instalado un casino. Sobre uno de los costados laterales de la casa de entretenimientos, en ese entonces, se encontraba el Tigre Hotel, posteriormente demolido.
  De estilo ítalo-francés, la mansión luce a nuestra vista, cargada con innumerables adornos, símbolos y detalles. Las columnas dóricas que la sustentan, la ornamentación a cargo de arcadas y guirnaldas; la doble altura que acentúa su esbeltez y una fachada más angosta al río otorgan una interesante elegancia rematada en la cubierta exterior, por una mansarda de tejas de zinc con dos torres aguja en su frente. Estamos en plena tradición académica, faltarían todavía dos décadas para entrar en la modernidad.
  En su destino inicial no estuvo destinado a sede cultural ni a museo, sino que fue consignado para lugar de baile y  diversión de un recorte social acomodado de la época. Albergó actividades ligadas al juego de azar, con 25 mesas de ruleta y punto y banca.
  El edificio fue declarado Monumento Histórico Nacional en el año 1979. La comuna se propuso entonces su reconversión a Museo. En 1990 un grupo de profesionales trabajó para lograr su regreso al esplendor original debiendo instrumentar la transformación de la antigua casa de juegos en el nuevo destino actual de museo de arte.
Puede ser entendida la complejidad del desarrollo atendiendo a que llevó quince años su concreción íntegra. La tarea de restauración fue sumamente compleja y los profesionales debieron interpretar el pensamiento de Luis Dubois y  Pablo Pater, arquitectos constructores de la sociedad anónima Tigre Club fundada en 1909.

  Elegí este hecho arquitectónico ya que es muy bella su arquitectura y su emplazamiento, esta ubicado en un gran parque de muchos colores naturales y alegres y esquinado por el rió tigre y un afluente de este. Lo que mas se destaca es su gran balcón que llega hasta la orilla del rió y este esta sostenido por múltiples columnas del orden dórico que le otorgan mucha elegancia y altura el mismo.